¿Está bien masticar goma de mascar luego de una cirugía de manga gástrica? Vamos a hablar de primeras, para responder esta pregunta, de la mentalidad que acompaña a los malos hábitos alimenticios.
Como bien sabemos, el viaje para recuperar nuestra vida y nuestro cuerpo, inicia con el reconocimiento de que el paciente tiene un problema que se le ha salido de las manos, ya que tiene una o varias enfermedades o patologías que se han derivado de su sobrepeso u obesidad. Esto es más común de lo que se cree, y además se estigmatiza precisamente porque no se le vé realmente como un enfermedad a ojos de la sociedad, situación que lo hace muchas veces más difícil para obtener comprensión y las herramientas adecuadas, que mientras se habla con alguien que se ha roto un pie o se ha fracturado un hueso; en realidad, están por el mismo camino.
Recordemos que las cirugías bariátricas (en este caso, una de bypass gástrico) son apenas una herramienta para lograr involucrar mejores hábitos de vida en todos los aspectos que componen las circunstancias de lo humano, es decir, de nuestra vida: una alimentación balanceada, el ejercicio y visitar regularmente al doctor (lo físico), meditación y/o oración (lo espiritual), acudir regularmente al psicólogo o de ser necesario, al psiquiatra (lo mental), y tener un contacto estrecho con la naturaleza o propiciar espacios para ello (lo ambiental).
La paciencia, la disciplina y el amor propio, son claves para que el éxito de una cirugía bariátrica sea real. Recuérdelo. Cada cuerpo y cada paciente, evoluciona a su propio ritmo, pero sí es vital estar al tanto de todos esos aspectos que comentábamos anteriormente. No sienta desaliento si los resultados que esperaba no se dan al ritmo al que otros pacientes han avanzado; sentir tristeza es muy humano y normal. Ahora, la tristeza y las sensaciones asociadas a lo “negativo” son eso: sensaciones. Aprender a darles manejo hace parte del viaje que cada paciente recorre en su propio sendero, y eso está bien. Dentro de esas sensaciones, la de “estar insatisfecho por ansiedad, estrés o depresión”, hace parte también de las sensaciones a las que hay que aprender a darles manejo.
Parte de esa mentalidad se ha derivado del mal o el inexistente manejo que se le ha dado a nuestras emociones complejas, que a su vez, terminaron haciendo mella en el alma a través de la comida o bien en enormes cantidades o bien con un muy bajo contenido nutricional pero un alto contenido de químicos, sodio, colorantes artificiales, grasas trans y/o conservantes. Por ello, la sensación de estar siempre comiendo, se ha vuelto una necesidad primordial para asociar, en el cerebro, el bienestar generalizado que llega con “comer”. Este mecanismo de defensa y de evitación debe ser controlado sin dudarlo, y una de las maneras que el paciente tiene para poder lidiar con ello, es evitando a toda costa, el comer goma de mascar.
Para contestar la pregunta de manera puntual, está prohibida la goma de mascar ya que el mensaje que se envía al organismo y al estómago en particular, es el de a activarse porque la mandíbula está masticando algo, y esta orden engaña al cerebro haciéndole pensar que debe activar el estómago para empezar a digerir lo que sea que vaya a entrar. Esto a su vez genera que los ácidos y los líquidos estomacales empiecen a acumularse, generando no sólo una probabilidad más alta conforme pasa el tiempo a ser más propensos a sufrir de gastritis y úlceras estomacales (precisamente porque no hay nada que digerir ya que la goma no se traga sino que se tira), sino que es de mucha gravedad el hacer esto para nuestros pacientes que se han sometido a una cirugía bariátrica, porque esto desequilibra y descompensa al organismo por estar vacío y sin nada qué digerir. Además, la situación puede ser aún más gravosa si el paciente está recién operado o en los períodos de dieta líquida o de dieta blanda, porque apenas se está volviendo a entrenar al organismo para que absorba muy bien todos los nutrientes y logre equilibrarse después de la operación.
Ingerir goma de mascar evita ese equilibrio y descompensa el organismo porque envía señales al cerebro y el estómago que no corresponden a la realidad nutricional que pasa dentro del organismo.
¿Cuándo se puede comer normal después de una manga gástrica?
Después de una operación de manga gástrica, es necesario hacer una dieta por etapas mientras el cuerpo se adecúa al nuevo tamaño del estómago, por lo que es altamente recomendable acostumbrarte a comer en porciones más pequeñas y así lograr evitar complicaciones después de la operación. Esta dieta se hace en varias etapas: la primera etapa, en la que solo se pueden consumir líquidos como caldos, gelatinas, café y té durante la primera semana. A partir de la segunda semana ya podrás ingerir alimentos como yogurt griego sin grasas, sopas, avena liquida y pudines. Ya a partir de la tercera semana vas a tener la posibilidad de ingerir alimentos blandos como purés, verduras machacadas y hervidas, carne molida y atún, entre otros. Todos siendo de contextura suave para no estresar a tu estómago. En la cuarta semana ya podrás incluir alimentos como verduras cocidas suaves, huevos, pollo y pescado. Durante la quinta semana podrás agregar alimentos sólidos a tu dieta, pero recuerda hacerlo de manera gradual de modo que te puedas ir adecuando a tu nuevo cuerpo.